Una mujer de 49 años, de nombre Lorna Baillie, le sucedió algo que aún no tiene una explicación médica. La mujer había tenido un infarto masivo, tras lo cual los médicos trataron de reanimarla durante 3 horas sin lograr el éxito, luego de esto le retiraron la respiración asistida, declarándola muerta. Su esposo de 59 años, se le acercó para despedirse, con un tierno "Lorna, vuelve, te amo" tras lo cual la mujer comenzó a recobrar el color en su piel y parpadeó, ante el asombro del propio esposo, y tras 45 minutos de retirarle el respidrador artificial.

Las dos hijas de Lorna lo presenciaron. Estaban junto a su cama preparadas para la despedida. La enfermera que los acompañaba no quiso alentar a la familia y les dijo que era una reacción normal después de un esfuerzo de reanimación prolongado, que eran solo movimientos involuntarios. Los familiares le exigieron a la enfermera que llamara a un médico para que explicara qué estaba pasando con una persona que hacia unos minutos estaba técnicamente muerta. La señora Baillie ha seguido recuperándose y la semana pasada fue trasladada de cuidados intensivos a una sala, logrando recuperarse, y los médicos ya hablan de una posible alta, sin explicarse aún lo ocurrido.